¿Por qué mi bebé odia el asiento del coche?
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En el mundo actual, donde la seguridad vial se valora cada vez más, la seguridad de los niños en los automóviles se ha convertido en el foco de atención social. Para los padres que poseen automóviles y tienen hijos, la compra de asientos de seguridad para niños es de suma importancia. Aunque la seguridad fue la consideración inicial, solo después de usar realmente los asientos de seguridad se aprecian verdaderamente sus beneficios.
La conciencia sobre las sillas de seguridad para niños está muy arraigada en la mente de las personas desde hace mucho tiempo, pero algunos padres aún enfrentan dolores de cabeza debido a la renuencia de sus hijos a sentarse en ellas, lo que a menudo provoca ataques de llanto. Las razones por las que a los bebés no les gusta usar sillas de seguridad se deben principalmente a:
Usar el asiento de seguridad demasiado tarde
Muchos bebés no empiezan a utilizar sillas de seguridad desde que nacen, sino que recién empiezan a utilizarlas cuando tienen uno o dos años. En el caso de los bebés más conservadores, mostrarán resistencia a sentarse en ellas. Introducir las sillas de seguridad desde la infancia es mucho más fácil que introducirlas una vez que el bebé haya desarrollado un sentido de autonomía.
Los asientos de seguridad ásperos hacen que los bebés se sientan incómodos
Los bebés tienen la piel sensible y reaccionan de forma especialmente aguda a las cosas que tocan. Una silla de seguridad con un material de superficie rugosa es una de las principales razones por las que a los bebés no les gustan. Los bebés más pequeños pueden llorar para expresar su sensibilidad y malestar, mientras que los bebés mayores o aquellos con un mejor desarrollo del lenguaje pueden mostrarse impacientes y enfatizarlo directamente con palabras.
De hecho, existen muchos beneficios al utilizar un asiento de seguridad para bebés en los automóviles, como por ejemplo:
Seguridad
En caso de frenazos repentinos, los niños que viajan en un asiento de seguridad pueden evitar colisiones inesperadas. Además, cuando los niños viajan en un asiento de seguridad, no corren por el coche ni interfieren en la conducción, lo que mejora enormemente el coeficiente de seguridad para todos los ocupantes del vehículo.
Conveniencia
Al colocar al niño en el asiento, los adultos pueden hacer sus propias cosas, comer, beber, revisar sus teléfonos, agarrar cosas, etc., todo con facilidad.
Fácil
Los bebés tienden a dormirse fácilmente en el coche, especialmente los más pequeños. Sostenerlos durante el viaje puede resultar agotador para los hombros y los brazos. Con una silla de seguridad, los padres pueden relajarse cuando el niño está despierto e incluso cuando está dormido.
Entonces, ¿qué métodos pueden utilizar los padres para que a sus bebés les encante sentarse en sillas de seguridad? Aquí hay algunas sugerencias:
Influencia sutil
Lo mejor es comenzar a utilizar el asiento de seguridad desde el nacimiento, ya que acostumbrarse a él desde una edad temprana será útil para futuros viajes.
Si el bebé ya ha desarrollado su sentido de sí mismo, los padres pueden preparar las bases antes de comprar el asiento de seguridad, explicándole sus beneficios y necesidad.
Pueden colocar el asiento en casa antes de la instalación para que el bebé se familiarice con él y recordarle antes de subir al auto que deberá sentarse en el asiento de seguridad. Al implementar estas múltiples influencias sutiles, los padres pueden sentar una buena base para que el bebé use el asiento de seguridad.
Distracción
La principal razón por la que a los niños no les gustan los asientos de seguridad es que no les gusta que los sujeten. Los niños son curiosos y activos por naturaleza, por lo que el primer paso para lograr que acepten el asiento de seguridad es evitar que se aburran.
Ofrécele cosas que le interesen para que se distraiga de la presencia del asiento de seguridad. Durante el viaje, intenta distraer al bebé con cosas como el paisaje exterior, ver dibujos animados, poner música o dejar que juegue con juguetes. Todas estas son buenas opciones.
Recompensa y orientación
Antes de un viaje, los padres pueden llegar a un acuerdo con el bebé: si llega sano y salvo, recibirá una recompensa. Hágale saber que usar la silla de seguridad de manera obediente es un buen comportamiento. Durante el viaje, cuando el bebé esté sentado solo, los padres también pueden felicitarlo.
¿Qué niño puede resistirse a la afirmación y reconocimiento de sus padres?
Es importante tener en cuenta que una vez que se ha adquirido el hábito de utilizar la silla de seguridad, no se debe dejar de hacerlo fácilmente. Los padres deben insistir en utilizar la silla de seguridad cada vez que el bebé viaje en coche.
¿A qué edad puede un niño utilizar una silla de coche?
Es importante aclarar que la edad adecuada para utilizar una silla de seguridad infantil no es fija, sino que está determinada por diversos factores como el peso, la altura y la edad del niño. En general, los niños menores de 12 años, que pesen menos de 36 kilogramos o que midan menos de 145 centímetros deberían utilizar sillas de seguridad.
Es obligatorio que los niños menores de 4 años utilicen una silla infantil cuando viajan en coche. Esto se debe a que los niños menores de 4 años no están completamente desarrollados físicamente y el uso de una silla de seguridad infantil puede reducir significativamente el riesgo de lesiones en caso de accidente.
En conclusión, las sillas de seguridad para niños son una de las medidas esenciales para garantizar la seguridad de los niños mientras viajan en coche. Como padres o tutores, prioricen la seguridad de sus hijos durante el viaje, absténganse de correr riesgos y bríndeles un entorno seguro y cómodo durante los viajes en coche.